Process Lasso es una utilidad que permite mejorar el rendimiento, la estabilidad y la capacidad de respuesta de un equipo, vigilando los procesos activos y controlando que no consuman determinadas cantidades de CPU (en %) o memoria RAM (MB). No es un remplazo del Administrador de tareas, sino de una herramienta que complementa el monitoreo con acción y multitud de opciones configurables según las necesidades de cada usuario. Una delicia para los usuarios avanzados de Windows.
Process Lasso es capaz de detectar procesos que se ejecuten repetidamente ó demasiadas veces ó que consuman grandes cantidades de recursos, imponiendo un límite para que el sistema no sufra pérdida de rendimiento y/o inestabilidad. Además, puede finalizar procesos automáticamente que se ejecuten por sí solos (virus, troyanos, etc.) y establecer prioridades de proceso a aplicaciones especificas cada vez que se inicien, entre otras útiles funciones, como el balanceo de recursos disponibles.
Al principio, es impactante ver la cantidad de opciones que ofrece Process Lasso por cada uno de los procesos activos. Lo más tedioso es configurarlo, pero los resultados que brinda son de enorme utilidad, sobre todo para mantener a raya esas aplicaciones que con el correr del tiempo (horas o incluso días), comienzan a devorar cantidades siderales de memoria RAM: esta utilidad se encargará automáticamente de detectar el inconveniente, cerrar el proceso voraz y reiniciarlo, para que esté fresco y el sistema tenga más RAM disponible. Es una aplicación gratuita, disponible para sistemas de 32 y de 64 bits, y se descarga desde el siguiente enlace:
https://bitsum.com/processlasso/